lunes, 21 de marzo de 2011

Putin compara resolución de la ONU con la cruzadas medievales


El primer ministro ruso, Vladimir Putin, advirtió que la resolución de Naciones Unidas sobre Libia recuerda “las apelaciones medievales a los cruzados” y confirma la necesidad de Moscú de “reforzar su capacidad defensiva”.

La resolución del Consejo de Seguridad es “incompleta” y “permite una intervención en un país soberano, y esto recuerda las apelaciones medievales a los cruzados”, dijo Putin en declaraciones difundidas por la agencia Itar-Tass.

“Lo que sucede en Libia es la prueba de que Rusia hace bien en reforzar su propia capacidad defensiva”, advirtió el primer ministro.

Putin manifestó que si bien Libia no puede ser considerado un país democrático, “esto no significa que cualquiera pueda intervenir desde el exterior en un conflicto político, aunque sea armado, defendiendo a una de las partes”.

“Preocupa la ligereza con la cual fue tomada la decisión de usar la fuerza”, subrayó el primer ministro, y sostuvo que la decisión de Estados Unidos de interferir en asuntos de otros países “está tomando una tendencia estable”.

Putin se pronunció cuando está en curso la visita del secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates, quien exhortó a Rusia a sumarse a la coalición internacional

INTERVENCIÓN EN LIBIA: La alianza igualitaria


Al anochecer del sábado 19, después de opíparo banquete, los líderes de la OTAN ordenaron el ataque contra Libia.

Desde luego, nada podía ocurrir sin que Estados Unidos reclamara su papel irrenunciable de máximo jefe. Desde el puesto de mando de esa institución en Europa, un oficial superior proclamó que se iniciaba la “Odisea del Amanecer”.

La opinión pública mundial estaba conmovida por la tragedia de Japón. El número de víctimas del terremoto, el tsunami, y el accidente nuclear, no ha cesado de crecer. Son ya decenas de miles las personas muertas, desaparecidas e irradiadas. Crecerá considerablemente también la resistencia al uso de la energía nuclear.

El mundo está sufriendo a la vez las consecuencias del cambio climático; la escasez y el precio de los alimentos, los gastos militares y el derroche de los recursos naturales y humanos, crecen. Una guerra era lo más inoportuno que podía ocurrir en estos momentos.

El recorrido de Obama por América Latina ha pasado a un segundo plano, nadie apenas se ocupa del tema. En Brasil, se han hecho evidentes las contradicciones de intereses entre Estados Unidos y ese hermano país.

No puede olvidarse que Río de Janeiro compitió con Chicago por la sede de los Juegos Olímpicos del 2016.

Obama quiso congraciarse con el gigante suramericano. Habló del “extraordinario ascenso de Brasil” que ha llamado la atención internacional y elogió su economía como una de las que más rápido crece en el mundo, pero no se comprometió en lo más mínimo con apoyar a Brasil como miembro permanente del privilegiado Consejo de Seguridad.

La Presidenta brasileña no vaciló en expresar su inconformidad con las medidas proteccionistas que Estados Unidos aplica a Brasil, a través de tarifas y subsidios que han constituido un fuerte obstáculo a la economía de ese país.

El escritor argentino Atilio Boron afirma que a Obama:

“…lo que [...] más le interesa en su calidad de administrador del imperio es avanzar en el control de la Amazonía. Requisito principal de este proyecto es entorpecer, ya que no puede detener, la creciente coordinación e integración política y económica en curso en la región y que tan importante han sido para hacer naufragar el ALCA en 2005 y frustrar la conspiración secesionista y golpista en Bolivia (2008) y Ecuador (2010). También debe tratar de sembrar la discordia entre los gobiernos más radicales de la región (Cuba, Venezuela, Bolivia y Ecuador) y los gobiernos ‘progresistas’ -principalmente Brasil, Argentina y Uruguay…”

“Para los más osados estrategas estadounidenses la cuenca amazónica, al igual que la Antártida, es un área de libre acceso en donde no se reconocen soberanías nacionales…”

Mañana Obama se traslada a Chile. Llegará precedido de una entrevista que concedió al diario El Mercurio, publicada hoy domingo, en la que confiesa que el “Discurso para las Américas” -así lo califica- se funda en una “alianza igualitaria” con Latinoamérica, que casi nos deja sin aliento al rememorar “La Alianza para el Progreso” que precedió la expedición mercenaria de Playa Girón.

Confiesa textualmente:

“nuestra visión para el hemisferio [...] se funda en el concepto de alianza igualitaria que he perseguido desde que asumí la Presidencia de Estados Unidos.

“‘También me enfocaré en áreas especificas en las que podemos trabajar juntos, como el crecimiento económico, la energía, la seguridad ciudadana y los derechos humanos’…

“Esa visión, puntualizó, tiene por objetivo ‘mejorar la seguridad común, expandir las oportunidades económicas, asegurar un futuro energético limpio y apoyar los valores democráticos que compartimos’.

“…promover un hemisferio seguro, estable y próspero en el que Estados Unidos y nuestros aliados comparten responsabilidades en asuntos claves tanto a nivel regional como global.”

Todo como puede apreciarse maravillosamente bello, digno de enterrarse como los secretos de Reagan, para publicarlo dentro de 200 años. El problema es que como informa la agencia DPA, según sondeo realizado por el diario La Tercera

“…en 2006 el 43 por ciento de la población chilena rechazaba las centrales nucleares.

“Dos años después el rechazo subió a 52 por ciento y en 2010 llegó a 74 por ciento.” Hoy, después de lo ocurrido en Japón alcanza al “…86 por ciento de los chilenos…”

Faltaría solo hacerle una pregunta a Obama. Tomando en cuenta que uno de sus ilustres predecesores, Richard Nixon, promovió el golpe de Estado y la muerte heroica de Salvador Allende, las torturas y el asesinato de miles de personas, ¿pedirá el señor Obama excusas al pueblo de Chile?

Las voces críticas contra la Operación “Odisea al Amanecer”


Por RFI

China “lamentó” la intervención, y Rusia instó a dejar de recurrir a la fuerza "no selectiva" a fin de evitar víctimas civiles. Ambos países se habían abstenido la votación en la ONU. Malestar de la Liga Arabe y la Unión Africana. Las feroces observaciones de Hugo Chávez.

El portavoz de la diplomacia rusa Alexandre Lukachevicht.sostuvo que "en el marco de la operación aérea en Libia, también se han lanzado ataques sobre objetivos de carácter no militar", y apuntó que "48 civiles y más de 150 han sido heridos". Por eso, Rusia instó a los países implicados “a que dejen de recurrir al uso no selectivo de la fuerza". El sábado, Rusia ya había manifestado su pesar por la intervención armada extranjera en el marco de la resolución 1973 de la ONU, que autoriza el recurso a la fuerza para proteger a la población libia contra los ataques del régimen del coronel Muamar Kadafi.

China también lamentó la intervención militar de la coalición occidental en Libia y mostró su oposición al uso de la fuerza en las relaciones internacionales, según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores hecho público el domingo. El texto, que no pide un cese el fuego, subraya que Pekín respeta "la soberanía, la independencia, la unidad y la integridad territorial" del país. “Esperamos que Libia pueda restablecer su estabilidad tan pronto como sea posible y evitar nuevas víctimas civiles ligadas a la escalada del conflicto armado", seguía el texto.

El secretario general de la Liga Arabe, el egipcio Amr Musa, criticó el domingo los bombardeos de la coalición internacional contra Libia, considerando que se apartan del objetivo de imponer una zona de exclusión aérea. “Lo que está pasando en Libia dista del objetivo y lo que nosotros queremos es la protección de los civiles y no bombardearlos", declaró Musa a los periodistas.

También el comité de la Unión Africana (UA) sobre Libia llamó este domingo desde Nuakchot a un "cese inmediato de todas las hostilidades" en ese país. Tras una reunión de más de cuatro horas, los miembros del comité hicieron público un comunicado en el que también se pide "la cooperación de las autoridades libias implicadas para facilitar el envío de asistencia humanitaria a la población necesitada".

En América Latina, el presidente venezolano, Hugo Chávez, calificó este sábado de "irresponsable" y de "injerencia" la acción internacional armada contra Libia, que según el mandatario sólo pretende apoderarse de su petróleo, y exigió un alto el fuego de verdad y de manera inmediata. "Ya comenzó la acción militar de los aliados contra Libia. Es muy lamentable. Hay que ver qué irresponsabilidad. Y detrás de eso la mano de Estados Unidos y sus aliados europeos", criticó Chávez en un acto en televisión.

Y agregó: "Es lamentable que la ONU se preste para avalar la guerra, pero la mano del imperio se impone. Ellos quieren adueñarse del petróleo de Libia. ¿Cuándo les importó la vida de los pueblos si siguen bombardeando Irak, Afganistán o la franja de Gaza?", se preguntó.

Rusia por el cese del uso de la fuerza no selectiva en Libia

Rusia llama con insistencia a la coalición occidental a cesar el uso de la fuerza no selectiva en Libia –ha manifestado el portavoz de la Cancillería rusa Alexander Lukashévich. Según el diplomático, durante los ataques aéreos contra Libia resultaron bombardeados objetivos no militares. Decenas de civiles perecieron y más de 150 resultaron heridos. Rusia considera inadmisible emplear el mandato que dimana de la resolucion del Consejo de Seguridad de la ONU para alcanzar objetivos que rebasan los marcos de las cláusulas del documento.

Los rebeldes ganan terreno tras el bombardeo a Gadafi







Los aliados derriban un edificio del palacio de Gadafi en Trípoli. Diferencias entre EE UU y Reino Unido sobre la posibilidad de atacar al dictador.

Por segunda noche consecutiva, Trípoli y el entorno de Bengasi han sido objetivos de los ataques de la alianza internacional que pretende frenar los abusos de Muamar Gadafi sobre su población. Con el control del aire en sus manos, la coalición intenta ahora inutilizar las fuerzas terrestres del coronel, que aún siguen presentes en puntos del este y en la ciudad de Misrata, a unos 200 kilómetros de Trípoli. Ante el castigo de los bombardeos internacionales, las fuerzas de Gadafi retroceden en el este y los rebeldes tratan de recuperar terreno. En Trípoli, un misil británico ha impactado contra un edificio del complejo presidencial donde reside Gadafi. Londres ha informado de que era un "centro de control" desde el que el coronel dirigía los movimientos de sus tropas. El golpe tan cercano al dictador ha dejado aflorar ciertas diferencias entre EE UU y Reino Unido en cuanto al futuro del dictador y si puede o no ser objetivo de la operación Amanecer de la Odisea.

El sábado, las fuerzas leales a Gadafi atacaron Bengasi, último reducto de los rebeldes, la ciudad que habían tomado como capital. Los ataques aéreos de los aviones franceses, iniciados el sábado, los han hecho recular hacia el sur, hacia la localidad de Ajdabiya. Decenas de vehículos y blindados quedaron ayer calcinados en la carretera que une ambas localidades. Ahora, las fuerzas de Gadafi han retrocedido hasta Ajdabiya, aunque los combates con los rebeldes siguen. Según informa la agencia AFP, varios centenares de milicianos rebeldes, armados con cohetes Katiusha y baterías antiaéreas montadas sobre camiones, se han concentrado por la mañana a escasos kilómetros de Ajdabiya, con el objetivo de arrebatársela a los gadafistas. "Incluso si morimos, vamos a entrar en Ajdabiya hoy", ha declarado un comandante rebelde. Desde el interior de la ciudad, los leales al dictador han disparado fuego de artillería. Un fotógrafo de la agencia dice haber visto a tres víctimas, muertos o muy gravemente heridos. Dentro de la ciudad, donde no hay electricidad ni agua, también se levantaban columnas de humo. En este punto, los insurrectos esperan más bombardeos aliados y la llegada de suministros para tomar la ciudad.

Los rebeldes han contado hasta primera hora de la mañana con los bombardeos de la coalición. Los aviones implicados en la operación Amanecer de la Odisea han bombardeado posiciones de los leales a Gadafi en torno a Ajdabiya desde primera hora de la noche hasta poco después del amanecer, informa Reuters. También han atacado a los soldados entre Ajdabiya y Brega. Los rebeldes celebraban el sonido de los aviones aliados, cuando el mismo sábado temblaban ante el mismo sonido, esta vez de los aviones de Gadafi. Los rebeldes han recuperado Zueitina, una localidad con terminal petrolera.

Atacado el complejo presidencial en Trípoli

También en Trípoli se ha vivido una segunda noche de bombardeos. Pasadas las ocho de la tarde locales (una hora más en la España peninsular) comenzaron a oírse explosiones acompañadas de un resplandor. Luego ráfagas de disparos seguidos de unas luces rojas que surcaban el cielo. Esta vez no había escudos humanos. Nadie los esperaba. Los jóvenes que se habían colocado frente a algunos objetivos militares en la noche del sábado para protegerlos salieron corriendo en cuanto se supo que algunas bases de Trípoli estaban siendo atacadas. Poco después, una columna de humo comenzó a salir de Bab al Azizia, el complejo palaciego en el que reside Gadafi a las afueras de la capital. Inmediatamente el régimen cogió a un puñado de periodistas y lo llevó a ver los destrozos. Un edificio administrativo de cuatro plantas, a 50 metros de la jaima en la que el coronel recibe a sus invitados, había quedado reducido a polvo, aparentemente por un misil crucero.

El golpe no solo tiene un fuerte valor emotivo (el complejo de Bab al Azizia es uno de los símbolos del régimen desde que Reagan lo bombardeó en 1986), sino que conjuga mal con lo que había asegurado poco antes un responsable del Pentágono, el vicealmirante William Gortney, que insistió en que el objetivo de la coalición no es en ningún caso abatir al dictador. En unas conversaciones con la prensa a bordo del avión que le lleva a Rusia para una gira de tres días, Robert Gates, el secretario del Departamento de Defensa de EE UU, abundó en la idea de que "sería insensato" matar a Gadafi, igual que sería insensato hacer cualquier cosa que se saliera del plan inicial de crear una zona de exclusión aérea. "Si comenzamos a añadir objetivos adicionales creo que crearemos un problema", afirmó, refiriéndose tácitamente a que intentar descabalgar a Gadafi podría crear fisuras dentro de la coalición aliada.

La insistencia de Gates sobre este punto tiene una explicación: horas antes el ministro de Exteriores británico, Liam Fox, había dejado caer que Gadafi podría llegar a ser un blanco de los proyectiles de los aliados dependiendo de cómo se desarrollaran los acontecimientos. EE UU niega con rotundidad ese propósito, lo que no quita que Reino Unido terminara reconociendo avanzada la madrugada que fue uno de sus submarinos el que atacó la residencia presidencial porque era un "centro de control" desde el que el coronel dirigía los movimientos de sus tropas.